Existen cientos de titulares y libros acerca de ángeles que resalta la importancia de «invocarles». Y más allá de ser importante aluden a la necesidad que tienes de darle la clave para que ellos actúen con mayor intensidad en tu vida. Si no me falla la memoria, hasta el día de hoy no he encontrado algún libro o temario sobre nuestros amigos celestiales que resalte el «siéntate y déjalo todo a tus ángeles». Al contrario, es un trabajo en equipo. Yo los llamo; ellos me atienden. Como cuando te diriges a un representante de servicio para que te colabore con algo, por ejemplo.
Ahora comprendo como me fui sumergiendo cada vez más en mi trabajo Angelical y es preciso reconocer que todo lo que yo hacía y hago es invocarlos. Tanto si voy de viaje de vacaciones, como si voy a cuidar de alguien, a recibir visita, a tomar decisiones, a trabajar en un proyecto especial, como para pedir iluminación y dirección.
Y es que si bien es cierto que los ángeles pueden cambiar tu vida, es igual de cierto que tenemos que darles permiso para que intervengan en nuestra vida.
Los ángeles son nuestros amigos , nuestros aliados invisibles, nuestros guías…y si no le otorgamos ese permiso para actuar en nuestras vidas se quedarían como simples espectadores que observan nuestros pasos sin poder hacer nada. Ellos responden a nuestro» libre albedrío» que nosotros tenemos de poder actuar sin necesidad de intervención alguna y ser responsables de nuestros propios actos. Pero cuando somos seres conscientes como tú y como yo, reconocemos que también somos seres espirituales y que gozamos de un regalo de Dios, que es la asistencia del mundo espiritual.
Para pedir esta ayuda no se requiere de grandes esfuerzos ni de conocimientos, no necesitas coger un curso de angeles para invocarlos. Invocarlo es tan sencillo como pedirles de su ayuda. Ya sea que le invoques, le llames, le actives, le pidas un favor, lo importante es que se lo pidamos. Aquí les dejo algunos ejemplo de cómo invocarlos:
5 Ejemplos para aprender a invocar a tus ángeles.
- Mis amados ángeles ayúdenme a…
- Invoco a mis ángeles para que me cubran a mi y mis hijos con su luz protectora.
- Ángel de mis hijos, llévalos por el buen camino siempre.
- Ángeles cuiden de mi familia siempre.
- Envío ángeles consoladores para que les rodeen en este momento de dolor.
- Ángel de mi guarda acrecienta mi fe ….
- acrecienta mi amor,
- cúbreme con tus alas,
- dame fuerzas para continuar.
- ayúdame a ver lo que necesito saber.
De igual manera puedes invocar a los ángeles Custodios de tus amigos y familiares. Siempre podemos hacer algo por alguien cuando conectamos con el amor y con los ángeles.
¡No tengas miedo de invocar a tus ángeles!